El Colegio de Arquitectos de Málaga ha puesto en marcha una Oficina de Rehabilitación con el objetivo de facilitarla gestión de las ayudas europeas destinadas a la rehabilitación de viviendas y regeneración de barrios y optimizar la ejecución de proyectos con el fin de que el mayor número de familias se beneficien de los fondos del Plan de Recuperación y Resiliencia, más conocidos como los Next Generation, y puedan mejorar su calidad de vida.

Así, para tal fin, la institución colegial abrió hace un mes una bolsa de arquitectos especializados que permitirá ofrecer una respuesta inmediata a la demanda de técnicos por parte de los solicitantes de las ayudas.

Esos técnicos informarán tanto a profesionales como a ciudadanos acerca de los trámites de la rehabilitación de inmuebles, canalizarán la gestión de subvenciones y gestionarán los proyectos de mejora de los inmuebles, según han informado en un comunicado.

Con esta iniciativa, dada a conocer en el reciente Salón Inmobiliario del Mediterráneo (Simed), el Colegio de Arquitectos de Málaga quiere contribuir a que las ciudades sean cada vez más sostenibles y más resilientes. La rehabilitación de edificios permite mejorar las condiciones de salubridad, habitabilidad, seguridad, accesibilidad, confort y bienestar del edificio, así como su comportamiento energético y medioambiental.

Los beneficios son muchos, ya que con la rehabilitación se consigue alargar la vida útil del edificio, disminuir la factura energética y las emisiones de gases de efecto invernadero, regenerar el entorno urbano, luchar contra la pobreza energética y facilitar el acceso y la utilización no discriminatoria, independiente y segura de los edificios a las personas con discapacidad.

El decano los arquitectos malagueños, Francisco Sarabia, ha señalado que la renovación del parque edificado "sigue siendo una asignatura pendiente en nuestro país y la rehabilitación de miles de viviendas supondrá un enorme esfuerzo de información y gestión, dado que en España la mayoría de las viviendas están constituidas en propiedad horizontal muy fragmentada".

De igual modo, ha explicado que "es imprescindible la apertura de estas oficinas de rehabilitación para optimizar los trabajos y facilitar la adecuación final de las solicitudes de ayudas, y eliminar casi en su totalidad la llegada a la Administración Pública de expedientes que deban ser denegados, ahorrando tiempo y recursos".

A través de los fondos europeos Next Generation se van a destinar 200 millones de euros para cinco programas distintos en materia de rehabilitación y eficiencia energética.

En concreto, habrá un programa de ayuda a las actuaciones de rehabilitación de barrios -en edificios y viviendas, así como urbanización-, otro programa de ayuda a las actuaciones de rehabilitación de edificios -para la mejora de la eficiencia energética-; un tercer programa de ayuda a las actuaciones de mejora de la eficiencia energética en viviendas -ya sean unifamiliares o de edificios plurifamiliares- y un cuarto programa para crear estas oficinas de rehabilitación que tengan por objetivo coordinar, informar y facilitar la gestión de ayudas, su implementación y la gestión integral de los proyectos de rehabilitación energética.

El quinto programa en esta materia es el de ayuda para el llamado Libro del Edificio y Proyecto de Rehabilitación, que pretende impulsar la implantación y generalización de un documento para la rehabilitación, así como el desarrollo de proyectos técnicos de rehabilitación integral de edificios.