Efectivos del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local de Málaga se vieron obligados a utilizar la fuerza para acceder a una vivienda e inmovilizar a su morador, un hombre de 30 años, que se estaba autolesionando "brutalmente" y rompiendo mobiliario y enseres en el interior. Al parecer, el joven se encontraba bajo los efectos de las drogas.

Los hechos tuvieron lugar pasadas las 09:00 del pasado lunes 3 de septiembre en un piso situado en la cuarta planta de un bloque de calle Salitre de la capital, en el que, según llamada telefónica recibida en la Sala 092 de la Policía Local, un individuo estaba arrojando mobiliario por la ventana de la vivienda al tiempo que gritaba que llamasen a la policía.

Los agentes se personaron en el lugar comprobaron desde el exterior del inmueble que un hombre gritaba frases incoherentes e ininteligibles en una mezcla de español e italiano. Los policías tuvieron que forzar la puerta para poder entrar a la vivienda, donde encontraron al varón ensangrentado y con múltiples cortes, portando unas tijeras y dando carreras totalmente fuera de sí.