Málaga

La lluvia alegra el campo malagueño: "Ha caído bien en cantidad y forma"

  • Asaja hace un balance positivo aunque lamenta daños puntuales en Coín y Cártama

  • "Si hubiera caído con la misma intensidad, hablaríamos de muchos daños"

Cultivo de naranjas en Cártama, ayer tras las lluvias.

Cultivo de naranjas en Cártama, ayer tras las lluvias. / EFE

La lluvia que ha dejado la borrasca Gloria a su paso por Málaga, hasta el momento, ha alegrado el campo de la provincia. "Es difícil de transmitir la felicidad; donde ha caído lo ha hecho bien en cantidad y forma", ha afirmado Baldomero Bellido, presidente de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de  Málaga. 

Las precipitaciones que cayeron ayer en la provincia se concentraron, sobre todo, en las localidades del Valle del Guadalhorce, con especial incidencia en Coín y Cártama. En la primera localidad llegaron a acumularse 211,3 litros por metro cuadrado a lo largo de la jornada; 179 en el caso de la segunda. También se produjo una fuerte granizada en la capital, aunque en zonas muy localizadas de la parte este, como el barrio de El Limonar

En total, según el balance de la delegación de la Junta de Andalucía en Málaga, la tromba de agua y la fuerte granizada dejaron en las urbes cerca de 150 incidencias y provocaron el desalojo de una guardería y de dos familias. 

Carmen Crespo, consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, ha explicado este viernes que la comisión técnica de desastres naturales se reunió ayer y está trabajando para evaluar los años, por lo que el próximo lunes se espera tener más datos de la incidencia en el Valle del Guadalhorce. Según la titular de la Administración regional, hay constancia de cortes en 20 instalaciones ganaderas y daños en algunos cítricos y frutas tropicales.

Según ha afirmado el presidente de Asaja Málaga, por su parte, los efectos más perjudiciales de la borrasca no llegaron a los campos de la provincia, excepto en contables excepciones en Coín y Cártama, donde se "han producido desbordamientos de arroyos que han anegado parcelas y daños puntuales en hortícolas". 

"Si las precipitaciones más intensas o el granizo hubieran caído en el campo, estaríamos hablando de multitud de daños. No es normal que el agua caiga de esa forma", ha puntualizado Bellido. 

"Es difícil generalizar porque hay agricultores que han sufrido daños, pero el balance es positivo", ha aseverado el presidente de Asaja, que reivindica, al tiempo, la necesidad de infraestructuras hidráulicas que permitan aprovechar lluvias como esta. "Desde los Montes hasta el mar hay una distancia muy corta que hace muy difícil acumular el agua", ha explicado. 

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