La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (Ciaiac) aprobó ayer, tras una jornada maratoniana de más de ocho horas, el informe preliminar del accidente del avión de Spanair del 20 de agosto que causó la muerte de 154 personas, informaron fuentes de la investigación.

Se han incorporado al borrador preliminar diversas consideraciones y alegaciones de las partes implicadas en el accidente, entre ellas las del fabricante del MD82 (Boeing) y del operador (Spanair).

El texto fue votado por el pleno de la Ciaiac una vez que se incorporaron a ella el pasado lunes tanto el piloto Valentín Villarroel, como los dos peritos del Colegio de Pilotos, que habían presentado su dimisión unas semanas antes, y que no fue aceptada por la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez.

El informe indica que los pilotos del aparato de Spanair siniestrado en Barajas llevaron a cabo el "protocolo de comprobación del avión", indicaron ayer fuentes próximas a la investigación.

Este protocolo es el que se lleva a cabo antes del despegue, que consiste en el repaso de una lista de la situación de los elementos del aparato.

Las fuentes añadieron que en el informe preliminar del accidente también se apunta que los pilotos dieron su conformidad a la situación de los flaps y que no se registró ningún aviso de que la configuración del avión no fuera la correcta para el despegue.

Asimismo, no existe ninguna recomendación en el mismo documento, que será entregado o al menos notificado, hoy a Aviación Civil y a Spanair, cuya publicación se hará un día después.

La aprobación del informe, según las mismas fuentes, fue respaldada por la totalidad del pleno. Este informe es preliminar, ya que el definitivo de la investigación sobre las causas del accidente del avión pueden durar uno o dos años.

Este texto final sí que recogería las recomendaciones pertinentes que tuvieran que hacerse para que no se vuelva a producir un accidente por las mismas causas.