Padres de más de 40 centros llevan al menos dos años solicitando toldos para el patio
Educación
El CEIP Valle Inclán de El Palo tiene compradas las telas desde el pasado curso y aún no tienen el permiso para colocarlas.


Si en mayo ya el calor se nota, las últimas tres semanas del curso se hacen bastante cuesta arriba por las altas temperaturas dentro del aula. Pero también en los patios de recreo. El sol pega con fuerza y pocos son los que tienen algo de sombra para refugiarse. En días de terral como los vividos el pasado lunes y martes vuelven a ponerse de manifiesto las carencias de muchos centros para hacer frente a estas jornadas ya veraniegos, al igual que las de septiembre. En la provincia y según las cifras manejadas por la Federación de Asociaciones de Padres, las familias de más de 40 colegios llevan al menos dos años reclamando que se coloquen toldos para evitar el sol y que sus hijos sufran posibles quemaduras de piel no sólo durante el descanso sino también en la clase de Educación Física.
"Toldos, pérgolas o cualquier sistema que evite que los niños vuelvan del recreo o de la actividad achicharrados", dicen desde Fdapa y subrayan que no se comprende que desde la Consejería de Salud se implemente un plan de fotoprotección con la participación de los centros "y luego resulta que los colegios no pueden proteger a los niños del sol".
Reiteran desde la federación que ya existen más de 40 centros, "que tengamos detectados, que ya lo hayan hablado y solicitado y en muchos casos han sido los padres los que han recaudado fondos para poner este tipo de soportes". Lo malo es que luego no siempre los pueden colocar. "La sorpresa llega cuando después de pagarlos no se pueden instalar porque no tienen autorización administrativa de la Agencia Pública Andaluza de Educación que te tiene que mandar a los técnicos para certificar que sea viable dicha instalación", comentan desde Fdapa. Y apuntan el caso del CEIP Ramón Valle Inclán de El Palo, en el que desde el año pasado esperan las telas a tener su uso y aún no cuentan con la autorización técnica.
"No es cuestión de que los niños no pasen calor exclusivamente, sino que se trata de prevenir enfermedades de la piel. En este distrito sanitario se conciencia de los riesgos de las quemaduras solares en los menores y eso es lo que hay que evitar", agregan desde Fdapa y concluyen que "unos han tenido la suerte de cumplir requisitos y tenerlos instalados y otros quieren al menos tener esa posibilidad".
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