El coco McFadden

Thad McFadden es una pesadilla consumada del Unicaja en las últimas temporadas. Recurrente ver al veterano escolta (camino de los 36 años) hacer actuaciones excelsas frente a los malagueños, insólito ejemplo, ya que no hay una sola explicación que justifique el porqué, más allá de una mera coincidencia. Demasiadas. No apareció, como el resto de UCAM en el Carpena, pero en este segundo partido de la serie emerge como una de las grandes amenazas que debe ser monitorizada por los cajistas, tiene Sito Alonso una plantilla talentosa, muy completa, pero nadie con esa capacidad de revolucionar los partidos en un pestañeo. Si aparece y entra en bucle, es un jugador peligrosísimo, experto en cambiar las tendencias; es de los jugadores de Murcia que tiene una mayor capacidad de romper el plan.

Canasta ganadora la pasada temporada en el Carpena, con aquella defensa imperial de Alberto, pero que no impidió que esa pelota tocara solo red, exhibiciones con San Pablo Burgos en su día. Son varios capítulos difíciles de digerir. En la transformación que ha sufrido el Unicaja desde el pasado año, deportivamente hablando, hay una variable que se mantiene intacta: el ver a McFadden haciendo daño a los malagueños. El último antecedente fue el partido en Murcia de hace unas semanas. 24 puntos y 23 de valoración, con 5/10 en triples, es cierto que con un volumen de tiro alto (intenta más de siete por partido en ACB), pero es alguien fiable cuando acierta en los primeros lanzamientos. Enfatizaba Ibon Navarro el peligro de UCAM si ve el aro con facilidad, el motor de su juego, un equipo que se transforma.

Llegó a España hace un lustro, ya como un jugador curtido en Europa, pero sin haber pisado una competición tan importante como la Liga Endesa. Tenerife (clave en el Lenovo Tenerife actual), Joventut de Badalona, San Pablo Burgos y Murcia. No está mal el currículum. Es un doble campeón de BCL, ambas en Burgos, y jugó el pasado verano su primer Eurobasket. 15 puntos y 4 asistencias fueron sus promedios en el campeonato.

Al Unicaja le gustaba este jugador hace un tiempo, antes de conformar la plantilla actual, de esos nombres que aparece en la lista de deseos, pero nunca se hizo un movimiento firme para ir a por él. Tyson Carter o Dylan Osetkowski muy probablemente estén en Málaga, entre otros motivos, por haber cuajado grandes actuaciones frente al conjunto malagueño. Que en ningún momento entre, va a ser una de las claves para que el Unicaja pueda certificar la Final Four en Murcia.