Se va recomponiendo el Unicaja tras una temporada dantesca dentro y fuera de la pista. Aunque en un orden de los movimientos discutible, el club de Los Guindos va adquiriendo normalidad con el paso de las semanas. A la apuesta por Fotis Katsikaris le siguió una reestructuración en el Consejo de administración que dejó a Sergio Corral como presidente interino con el posterior cambio de la esfera de la Euroliga a la FIBA. Y aún quedan temas importantes por certificar como el sustituto de Manolo Rubia. Juanma Rodríguez está bien posicionado y aún no renovó por el Coosur Betis, pero no es el único candidato bien valorado. En esas, el equipo malagueño trata de confeccionar la plantilla de la próximas temporadas. 

Y en ese sentido ya hay un jugador que tiene una oferta cajista sobre la mesa, como es conocido. El elegido para ocupar el lugar que deja Mekel es Darius Thompson. El estadounidense tiene una buena propuesta, con una oferta multianual. Un ofrecimiento acorde a los nuevos cánones en los que se mueve el Unicaja tras la pérdida de potencial económico. No será tan drástico como se pudo pensar en un momento, aunque lo cierto es que aún está por definir con exactitud, pero sí hará perder al menos un peldaño en el escalafón. Dicho de otro modo, el estatus no será el mismo. 

Se ha podido comprobar en estos días, donde trascendía el interés por Artem Pustovyi. En esa carrera por el ucraniano se impuso, a falta de oficialidad, el Herbalife Gran Canaria. En temporadas anteriores esa batalla era ganado por el conjunto malagueño en la gran mayoría de ocasiones. Ahora los isleños llegan a un salario casi inalcanzable en Málaga. Y más aún con los contratos que tiene firmados el Unicaja, muchos de los cuales quiere negociar aunque aún no haya noticias positivas al respecto. De la habilidad de los gestores cajistas en esa difícil tarea dependerá lo que haya en el cajón para los fichajes. El del pívot es un ejemplo que evidencia de manera clara algo que podía preverse. 

Tener menos dinero no es sinónimo de fichar mal y viceversa. Pero sí conduce a hacer apuestas como la de Thompson, a falta de certificarse. El interés en él da muchas pistas del mercado en el que se mueve ahora el Unicaja, más allá de los perfiles que se estén buscando. El paso a la Champions League en el corto plazo resta potencial deportivo, más después de confirmar los participantes de la próxima campaña, y por ende a la hora de posicionarse para convencer a los jugadores. Se verá en el futuro, pero ahora se está en la tercera competición en el rango europeo. Además de los Euroligas y el Valencia Básket, ahora la pelea con Joventut, Andorra y Gran Canaria es mucho más feroz. Y en muchas ocasiones se estará por detrás. Son los nuevos condicionantes que se viven en Los Guindos.