De la misma forma que no hay libertad sin igualdad, tampoco hay libertad sin dignidad de la persona.

En esa fecha, Andalucía acudió en masa a votar, no para separarse de otros ni para imponerse sobre nadie.

Impedir que esas posiciones políticas puedan convertir su ideario en leyes es una obligación de cualquier demócrata.

Se facilita la creación de universidades privadas como una forma de facilitar títulos a quien se los pueda pagar.

El diputado Casero salvó la convalidación de la reforma laboral y que no se tramite como proyecto de ley.

Se trata garantizar los principios y valores sobre los que se ha construido una Europa abierta y plural.

No se puede pretender que una concepción religiosa de la vida se transforme en una ley aplicable a todos.

Hay un retorno a la normalidad legislativa con un Gobierno capaz de articular mayorías necesarias.

Si hay que hacer balance de la gestión de la sanidad en Andalucía sólo cabe decir que está siendo un desastre.

Es posible que el líder de la oposición desgaste al presidente con sus exabruptos, pero parece que se desgasta más él.