Rescatan a un perro atrapado en el cauce de un arroyo en Antequera

La Guardia Civil rescató el pasado mes de marzo a un perro que se había quedado atrapado en el cauce de un arroyo en el municipio de Antequera.

La actuación se inició tras recibir llamada de un ciudadano comunicando que había un animal atrapado en un muro de escollera, al menos desde el día anterior, habiéndose percatado al oír unos débiles ladridos que provenían del interior del muro, han informado desde el Instituto Armado en un comunicado.

El hombre habría intentado rescatarlo por sus propios medios, pero no lo logró. Por ello, se desplazaron al lugar agentes pertenecientes al Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Antequera que localizaron al perro en el interior de un muro a unos 3 metros de profundidad en el cauce de un arroyo.

El animal presentaba síntomas de llevar un largo tiempo atrapado, han indicado, encontrándose exhausto y desnutrido, por lo que se procedió intentar evacuarlo a la mayor brevedad.

Para lograr acceder a la pequeña cavidad donde se encontraba fue necesario mover varios bloques de piedra y utilizar los medios técnicos disponibles hasta rescatarlo sin poner en riesgo su integridad.

Una vez liberado los agentes le ofrecieron agua y se procedió a la lectura del chip obligatorio para su identificación, pero carecía de él, por lo que se trasladó a una clínica veterinaria de la localidad para darle el tratamiento y cuidados necesarios, han concluido.

Rescate en un incendio en Campillos

Por otra parte, la Guardia Civil también ha informado de que una patrulla de Seguridad Ciudadana perteneciente a la Compañía de Antequera ha rescatado a una persona con movilidad reducida del interior de una vivienda que se encontraba en llamas en la localidad de Campillos.

Así lo ha dado a conocer el cuerpo armado en una nota informativa, en la que relata que el hecho tuvo lugar cuando la patrulla fue requerida por un vecino que alertó del fuego en la vivienda.

Al llegar al lugar los agentes observaron a una persona que se encontraba pidiendo auxilio desde un balcón de la vivienda afectada, la cual pudo salir por sus propios medios.

Cuando los guardias civiles subieron hasta la primera planta de la vivienda, hallaron una persona afectada por la inhalación de humo, respirando con dificultad por lo que la sacaron con premura de la vivienda.

La persona auxiliada tenía la movilidad reducida y accedía habitualmente a la primera planta de la vivienda por medio de una silla elevadora automatizada.