Sr. Alcalde, ¿por qué no paraliza el procedimiento de la torre del puerto y oye a los malagueños?

Málaga ya conoce el precio de equivocarse con su horizonte. Lo aprendimos cuando se levantaron la Malagueta o el Málaga Palacio, decisiones que hoy asumimos como parte de la ciudad, pero cuyo coste estético y urbano nadie ignora y olvida

La torre del puerto de Málaga: historia y contradicciones, de Seguí a Chipperfield